Los minutos de la mañana parecen no terminarse, ¿cuántos minutos cabran en las mañanas? ¿se levantarán rápido y correrán al trabajo? ¿o sólo caminan en calidad de zombies en busca de un poco de sueño o una taza de café que se los quite?...
Bien. El café de la mañana está listo, we have ran out of granitos de cafe. De hoy, hasta la siguiente quincena, utilizaré el bajísimo recurso café soluble. No puedo dejar el cigarro, hay algo que no me deja, y no son reacciones químicas, ni lo desorbitante que me es la primera fumada, no, hay algo más... ¿qué será?
Y... Café con cigarro, no me resistó, bueno sí, a veces, a ves es, aves es, aves son, así va la cosa: de una lado al otro. Brincando y suspirando, rompiendo, construcción, destrucción, construcción, deconstrucción, respiro, casco de construcción empolvado, polvo, nariz, estornudo, orgasmo, impulso eléctrico sexual.
Sorbo caliente, el agua que se enfría a la inversa de los minutos de la mañana... o en paralelo, pasa todo muy rápido por las mañanas, y yo sigo sin fumar, estaba por anunciar "no puedo terminar nada de lo que comienzo, inclusive, ni un cigarro"... y me quede pensando si eso sería cierto... ¿lo será?, la verdad no tengo un hecho echado a la suerte que demuestre lo contrario, sólo libros, pedazos de cuentos leídos por completo... ¿contará eso?
Y los minutos no se acaban, ¿serán las mañanas interminablemente finitas?...
Esta ave de noche se despide... y dice "escuchemos a Mia Doi Todd" (en su maispeis); los minutos en compañia de sus acordes se pasan más lento, se disfruta mejor el tiempo...
Salut!
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